Gracias a tu apoyo y el de muchas empresas caritativas en la colecta 2021 se lograron significativos avances como pago de sueldos y proveedores, impermeabilización total del edificio, se recuperó documento como institución para emitir recibos deducibles de impuestos y poder recibir donaciones, se cambiaron baños, aires acondicionados para cuarto de los hombres y algunas otras cosas.
Más sin embargo falta mucho por hacer, son un sin número de requerimientos del edificio y de las instalaciones, estamos a la mitad del camino.
Es por eso que hacemos un nuevo llamado a cooperar porque nuestros viejitos hoy nos necesitan a todos.
Somos una institución de beneficencia que da hogar, alimento, asistencia médica y espiritual a personas de la tercera edad que se encuentran en TOTAL DESAMPARO, desde su llegada hasta sus últimos días. Trabajamos duro cada día para que nuestros abuelitos tengan una estancia placentera, el respeto, cariño y la atención que necesitan y se merecen.
El Asilo de Ancianos Aida S. de Rodríguez “Juan Pablo II” es una institución de asistencia privada fundada en el año de 1936, con la finalidad de brindar un techo, alimento, asistencia médica y espiritual a los ancianitos que se encuentran sin ningún apoyo social o familiar.
La primera ubicación de este lugar fue en la calle Oaxaca, tiempo en el que se daba atención a personas que salían de la cárcel sin tener un lugar donde vivir y necesitaban un lugar donde dormir por las noches, así como a gente sin hogar que viva en las calles.
El general Abelardo L. Rodríguez cuando estaba como gobernador el Estado, decidió encomendar este asilo a Don Juan Navarrete y Guerrero, Obispo de Sonora en aquellos años, para que lograra mantenerlo en buen estado. El Obispo Navarrete encargo la dirección de la institución a una de sus auxiliares, la Sra. Armida Velasco Carpena y junto con un grupo de 10 señoras cuidaron a más de 100 personas en su gran mayoría adulto mayor en desamparo.
El 1 de abril de 1945 se logró construir el actual edificio donde se encuentra la Casa Hogar y se le dio el nombre de Aida S. de Rodríguez esposa del Gral. Abelardo L. Rodríguez, quien era la principal benefactora.
